En primer lugar tenemos que darte un dato importante: para que un aceite esencial sea verdaderamente efectivo, debes adquirirlo en su forma más pura, extraído directamente de la planta. Importante también que su producción haya sido ecológica, libre de pesticidas ni fertilizantes que alteren su pureza y sus propiedades naturales.
Recuerda también que debes conservarlos siempre en lugares frescos y en botes de cristal oscuros. Veamos ahora el listado de cuáles son los más beneficiosos:
- El aceite de coco
Es maravilloso, ideal para cosmética y aromaterapia. ¿Quieres saber todo lo que puede hacer por ti? Es perfecto para tratar problemas de acné o sus cicatrices. También es un gran tonificante.
Además, actúa como un excelente antibacteriano, perfecto para prevenir además hongos o cualquier tipo de infección. Y protege y suaviza la piel y el cabello (estupendo si lo utilizas como mascarilla capilar), siendo muy efectivo para cabellos maltratados y pieles secas.
- Aceite de caléndula
Este aceite es adecuado para personas con psoriasis, dermatitis y manchas en la piel. Es ideal, además, para los niños pequeños o personas con pieles muy delicadas.
¿Sueles tener varices? ¿Eres de las que suele padecer reacciones alérgicas o irritaciones? Entonces este aceite te irá muy bien. Y es perfecto para atenuar las manchas que nos salen del sol.
- Aceite del árbol del té
Es imprescindible tener aceite del árbol del té en casa ¿Sabes por qué? Porque tiene un gran poder antibacteriano y desinfectante. Es muy adecuado para curar cualquier herida o arañazo.
Es perfecto para curar y secar granitos que nos salen en la cara a causa del acné o por reacciones alérgicas. Y es muy práctico para combatir los molestos piojos.
- Aceite de almendras dulces
Es uno de los mejores aceites esenciales y el que más se utiliza en aromaterapia. Es ideal para todo tipo de pieles, tanto para las más secas como las más delicadas.
El aceite de almendras es muy rico en minerales y vitaminas, suaviza la piel y la cura, así que es perfecto para tratar heridas, quemaduras, grietas, cicatrices… Y es un buen hidratante, por lo que es ideal para aplicarnos en el cuerpo después de la ducha.
- Aceite de argán
El aceite de argán es un poco más caro, es cierto, pero esa pequeña inversión merece sin duda la pena, dados los grandes beneficios que nos aporta, en especial si nuestra piel ya es un poco más madura. Es un maravilloso antioxidante, previene el envejecimiento de los tejidos y combate muy efectivamente los radicales libres.
El aceite de argán tiene 50 veces más vitamina E que el aceite de oliva. ¡Increíble! Aporta elasticidad, tonicidad y juventud a la piel.
- Aceite de rosa mosqueta
Es uno de los más usados hoy en día gracias a sus ácidos grasos esenciales, perfectos para nutrir y regenerar la piel. Si tienes estrías o cicatrices, no dudes en aplicarte cada día un poco de aceite de rosa mosqueta. Verás como, día a día, se van atenuando.
No solo previene la aparición de arrugas y estrías, también es muy útil para tratar el acné.
- Aceite de hipérico
Es muy conocido por su acción relajante, ideal para reducir el estrés y ayudarnos a conciliar el sueño. Esta planta tiene hipericina, un tipo de enzima que nos ayuda a reducir la cantidad de adrenalina y, por tanto, a relajarnos.
Para beneficiarnos de este aceite, basta con hacernos un pequeño masaje en las muñecas, el pecho y el cuello. Verás qué bien te hace sentir.
- Aceite de jojoba
El aceite de jojoba tiene como principal beneficio su alto porcentaje de ceramidas. ¿Sabes para qué sirven estos elementos naturales? Para conseguir que nuestras células estén unidas y, por tanto, que la piel esté elástica e hidratada. ¡Es fantástico!
El aceite de jojoba trata muy efectivamente problemas de acné, el exceso de grasa o los brillos. Destacar también que es muy rico en vitamina E, perfecto para prevenir el envejecimiento prematuro de la piel.
- Aceite de lavanda
Es realmente práctico, es perfecto para suavizar cicatrices producidas por el acné y para curar heridas o incluso quemaduras. Es ideal también para prevenir arrugas.
Uno de sus mejores beneficios es ayudarnos a conciliar el sueño. ¿Sabes cómo? Poniendo dos gotitas sobre tu almohada. ¡Verás cómo te relaja!
- Aceite de germen de trigo
El germen de trigo es un excelente antioxidante y nutritivo, perfecto para pieles o maduras o muy castigadas por el sol.
Sus propiedades vienen de sus múltiples minerales, aminoácidos esenciales y vitaminas. Es ideal para atenuar arrugas y conseguir una piel más elástica.¡Da muy buenos resultados, no dudes en probarlo
fuente: Mejor con salud
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